Re: Where the streets have no name~

por **April R. Williams** Dom Nov 27, 2011 12:06 am

"Casi todos van armados".
Ivayne solo había respondido con ese obvio, seco, casi frío y cortante comentario.
A April ya no le quedaba duda de que su nueva amiga era de aquella "secta" tan extraña; pero quién era ella para criticarla; aunque sí que se le ocurrió hacerle una pregunta, con ojos curiosos:

-Ivayne, ¿qué se supone que hacéis... allí? -no pretendía meterse en la vida de los demás, y menos en la de Ivayne; pero quería saber qué se cocía en esa "secta".

La mirada de April cambió al oír la pregunta que le hizo Ivayne sobre la frase que había usado antes. Se detuvo unos momentos breves para recordarlo, pero en lugar de hacerlo con el dolor y la furia habitual, una sonrisa triste y melancólica se extendió por su cara al contarlo:

-A mi madre le gustaba leer, y nos contaba historias a mis hermanos y a mí. Esa frase... era de una historia que había leído en un libro "para adolescentes" -meneó la cabeza con una sonrisa-, decía que era preciosa y que le encantaría poder vivir en aquél entonces... Iba de una bruja enamorada, de magia, de gente que controlaba el aire, el fuego...-miró a Ivayne con una sonrisa pícara y burlona- Y ahora es posible.

April apartó la vista de la mueca espantada de Ivayne cuando le contó sobre la muerte de su hermano.

-No es para tan... -se detuvo, pues estaba a punto de decir una mentira. Se mordió levemente el labio inferior, pensando qué frase tranquilizadora podía decirle a Ivayne sin mentirle. Una bombilla se encendió en su cabeza mientras hacía ese gesto con la mano que ya había visto hacer a su amiga - Ya no es tan malo, antes era... peor.

Después de escuchar las preguntas de Ivayne, April la miró aún más sorprendida de lo que parecia estar la elementalista de fuego, pero su voz fue más bien indiferente -aunque por dentro estaba hirviendo de furia- cuando le contestó.

-Sí, antes de... lo de mi hermano. Huí básicamente porque me enfadé tanto y mi control era tan reciente que... los maté a todos, no podía salvar a mi hermano así que... me desahogué con ellos.

No se había dado cuenta de que hablaba con voz susurrante, pero no pudo parar:

-Creo que iban a experimentar conmigo, pero no me tuvieron el tiempo suficiente como para agarrarme... Desde ese día evito a los humanos, los odio, sí; los mataría a todos si pudiese, pero sé que mi hermana no, y por eso no los he atacado libremente, no sé... -se detuvo, pensativa- Es como si supiese que mi hermana no lo haría, ¿sabes? Pero yo sí.

FdR: Me encanta Kai *_*

por **Ivayne Lann** Dom Nov 27, 2011 6:24 am

Ivayne enarcó una ceja y miró a April con expresión de desconcierto. ¿Dónde se suponía que estaba allí? Tras unos segundos se dio cuenta con asombro de que tal vez se refería a Ragnarök, pero ella no recordaba haber mencionado al grupo mutante, y tampoco creía que la existencia del mismo fuera tan conocida. Ella misma había creído que era un bulo hasta que no estuvo dentro.

-¿A qué te refieres? -preguntó sin embargo otorgando un tono de desconcierto a su voz. No estaba dispuesta a admitir que pertenecía a Ragnarök. Vamos, en teoría no se podía. Enid se lo había dicho pero porque ella había expresado claramente sus deseos de ingresar, pero en primer lugar April no parecía muy favorable a su labor, y en segundo ella no tenía ningún poder de reclutamiento.

Ivayne sonrió al oír el argumento de la historia. Ese era precisamente el tipo de historias que a ella le gustaba leer. Con los elementos que le mencionó April le venían mil libros a la cabeza, pero no se molestó en preguntar el título. ¿De qué iba a servir?

-Por ésto yo nunca me he arrepentido de haberme quedado en la tierra -comentó. ¿Qué niño no había querido durante la infancia tener poderes como los que ellos tenían ahora? Aunque de haber podido elegir ella se habría quedado con algo que le permitiese volar, pues siempre la habían apasionado el cielo y la idea de recorrerlo sin la necesidad de aviones, pero no podía quejarse de su dominio sobre el fuego. Ahora era parte de ella.

La elementaista asintió con la cabeza. Entendía perfectamente a qué se refería. Al principio controlar los poderes era de todo menos fácil, y no le extrañaba en absoluto que se hubiesen desbocado debido al miedo y la rabia.
Por otra parte no entendía del todo los ideales de April. Predicaba ideales propios de Eirene, pero a la vez mostraba un claro sentimiento de venganza hacia todos los humanos. Ivayne, por su parte, no odiaba a todos los humanos, sólo a sus líderes, pues eran ellos los que habían decidido abandonar la tierra para más tarde volver y enemistarse con los que abandonaron en ella tanto tiempo atrás. El resto no eran más que peones, gente sin nombre que no tenía nada que ver en aquella guerra.

-Entiendo -dijo dando un golpe seco con la cabeza-. Haz como tu hermana, no todos los humanos son malos ni todos los mutantes buenos -comentó con una sonrisa. Por mucho que estuviera en Ragnarök no era ninguna tonta. Lo único que diferenciaba a los humanos de los mutantes eran las circunstancias, pero por dentro las personas seguían siendo lo mismo que eran diez años atrás. Los hijos de puta seguían siéndolo, con poderes o sin ellos, al igual que las buenas personas.

FdR: A mi también *^* Sus frases son tan... *O*

por **April R. Williams** Dom Nov 27, 2011 9:45 pm

Vio cómo Ivayne arqueaba una ceja y por un momento su aura rojiza se desdibujó de nuevo. April se arrepintió de haberle hecho la pregunta, pero ya no había vuelta atrás, por lo que agachó la cabeza y susurró, mirando al suelo:

-He oído que hay una... secta o algo parecido, que lo que se supone que quieren es acabar con los humanos... al menos, eso he oído por ahí.

No era mentira, durante sus muchas excursiones cerca de la muralla de la Ciudad de los Humanos había oído un nombre extraño... Ragnajor o algo así. Había intentado investigar mucho, pero no había sacado nada en claro, por el momento.

Sonrió cuando Ivayne comentó que por sus poderes,ella nunca se había arrepentido de quedarse en la Tierra.

-Yo creo que tampoco me arrepiento, solo... solo que me gustaría que las cosas fuesen... diferentes; al menos, en las historias de mi madre no hacía falta entrenar... mucho -sonrió, quería aligerar el tema de conversación.

Correspondió a la sonrisa de Ivayne y a su frase con una risa.

-Así que quizá me encuentre a un humano que no quiera volarme la cabeza y a un mutante que me quiera comer viva... -la miró con una sonrisa burlona y entrecerrando los ojos y murmuró, mientras se encogía, como si se protegiese- Aléjate de mí, come-mutantes.

Y se echó a reír.

-¿Sabes, Ivayne...? -añadió al final con una tierna sonrisa- Creo que me caes bien, pero, eh... Solo creo. No te vayas a ilusionar, quizá al final soy una come-mutantes o una humana muy inteligente... -era broma, y así lo demostró sonriéndole con ganas.

FdR::

por **Ivayne Lann** Dom Dic 04, 2011 5:47 am

Una sonrisa se escapó por la comisura de sus labios al oír lo de "secta". A su parecer distaban mucho de poderse calificar así, pero entendía que a April el grupo le pareciera más sectario que otra cosa. Amplió la sonrisa y sacudió la cabeza antes de responder.

-Ah, ya sé de quién hablas -dijo-. Pero pensaba que eso eran solo rumores -No quería arriesgarse a mentirle, ya que con su poder podía descubrirla, así que aquello técnicamente era verdad, porque ella lo había creído así antes.

Ivayne rió. Recordaba lo frustrante que había sido al principio aquello de los poderes y tratar de controlarlos, pero de todas formas las historias nunca le habían parecido realistas del todo. ¿Cómo tragarse que alguien que acaba de descubrir que tiene poderes es capaz de hacer las cosas que hace en tan solo... días? Imposible.

-En esta vida hay que entrenar para casi todo -rió la elementalista-. Pero al final compensa -Se encogió de hombros sin perder la sonrisa.

Asintió divertida.

-Exactamente. Hay humanos geniales y mutantes que son verdaderos psicópatas -Y le venían a la cabeza más de uno. Volvió a reír ante la pequeña interpretación de April.

Ivayne enarcó una ceja pero con un asomo de sonrisa aún en los labios.

-Ahora mismo me sería imposible creer que eres una humana -comentó al recordar lo que la chica le había enseñado. Había quedado más que patente que tenía poderes-. Lo otro todavía es posible -Y dicho esto dio un paso atrás con una expresión exagerada de desconfianza, tras lo cual se echó a reír. Hacía tiempo que no reía de verdad y lo cierto era que lo necesitaba.

FdR: Él es genial :3 Pero me gusta más Jack. ¿Has leído MdI?
Gracias Where the streets have no name~ - Página 2 368178

Where the streets have no name~ - Página 2 368178

Y siento haber tardado tanto en postear, he tenido una semana de exámenes super horrible .__.

por **April R. Williams** Dom Dic 04, 2011 1:35 pm

April observó la sonrisa de Ivayne y sonrió a su vez al ver cómo su amiga movía la cabeza de un lado a otro.
-Creo que sí, pero en todos los rumores hay algo de verdad... -April sonrió aún más, de broma.
No quiso pensar en la razón que debía haber para que se le hubiese erizado el pelo de la nuca, pues normalmente eso solo ocurría cuando algo no andaba bien. Guardó ese pensamiento para otro momento, no quería rayarse más la cabeza.

April frunció el ceño con una mirada entre divertida y contrariada.
-Prefería controlar mis poderes en un día... -murmuró sonriendo-. A mí no me parece mal ni nada por el estilo... Al contrario -al final sonrió-.

La elementalista del aire bufó al oír el comentario sobre mutantes psicópatas.
-Yo aún no he visto uno. Y siendo que yo estoy bastante loca... Júntate con locos y acabarás en un manicomio -rió.
Se carcajeó ante la expresión y el comportamiento de Ivayne, de verdad que esa chica la hacía reír tanto...

Al final, April miró a su alrededor curiosa y susurró en tono cómplice:
-Hemos desalojado las calles, Ivy.
No pensó que Ivayne fuese a molestarse por el apodo, pero quién sabía...
En la calle no había nadie. Nadie de nadie.
-Esto de que las calles parezcan el Desierto... ¿es normal? -miró a Ivayne con el ceño fruncido- ¿O es que ha venido un come-mutantes y se los ha zampado? -sonrió intentando quitarle hierro al asunto- ¿Seremos las siguientes...? -abrió los ojos desmesuradamente y se echó a reír haciendo una mueca.

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Off: ¿Qué criatura no viviente no ha leído MdI? *--* Yo también era del Team Jack, aunque a la mayoría de mis amigas les encantaba Christian ¬¬ (admito que tenía sus momentos, pero es que Jack... era mucho Jack :3 ) y yo soy "la rarita de Jack" xDD
¡De nada, te lo mereces!
Ah, y todos estamos más que hartos de los exámenes, se cargan la actividad de los foros ¬¬

por **Ivayne Lann** Lun Dic 12, 2011 4:21 am

Ivayne asintió pensativa.

-Tienes razón -aceptó-. Pero si te soy sincera nunca me he molestado en indagar -dijo sacudiendo la mano como si el asunto no le importara. De nuevo procuraba tirar de las medias verdades, ya que también era cierto que nunca había indagado. Al menos voluntariamente.

Como a todos, pensó la chica con una sonrisa divertida plasmada en su rostro. Ojalá fuera tan fácil como descubrir los poderes y saber controlarlos directamente. Pero por otro lado a ella le encantaba ese orgullo personal que sentía al descubrir algo nuevo, o al conseguir dominar una faceta de su don que hasta entonces se le había resistido.
Sacudió la cabeza y cambió de tema para centrarse en los mutantes locos. En realidad era normal que April no hubiese visto ninguno si llevaba tanto tiempo sola.

-Tranquila, aquí te hartarás de ver de ésos -aseguró con un atisbo de sonrisa-. Pero son inofensivos, la mayoría -Y los que no lo eran no suponían muchos problemas porque allí abajo había mucha gente y entre todos era fácil controlarlos. Además estaba el hecho de que generalmente eran irreflexivos y solían arriesgar su vida tontamente, por lo que acababan muertos muy deprisa. Dejando a un lado aquellos pensamientos Ivayne escrutó la calle-túnel y se dio cuenta de que, en efecto, aquello estaba muy tranquilo-. Bueno, antes de llegar tú tampoco estaba esto muy animado. La gente sólo sale de casa cuando es necesario, el resto del tiempo prefiere permanecer a buen recaudo -se encogió de hombros divertida-. En cualquier caso espero que no haya come-mutantes por los alrededores -dijo y se echó a reír con ella.

FdR: Yo y mis amigas siempre íbamos con Jack xDD Kirtash nos molaba, pero a quien odiábamos era a Victoria. Con 13 años que una pava esté con dos tíos es de zorra, por muy libro que sea xD
Bueno, siento de nuevo haber tardado tanto xD Pero ya he acabado los exámenes, así que...

por **April R. Williams** Mar Dic 13, 2011 7:36 am

April asintió distraídamente al escuchar el comentario de Ivayne.
-Bueno, de todos modos dudo que exista, deben ser mitos o leyendas... ¿no? -sonrió inocentemente, pero sus ojos la traicionaron, se veía en ellos el fuego de la curiosidad.

Rió cuando Ivayne hizo alusión a los mutantes locos.
-Yo estoy loca también, pero te prometo que soy cien por cien inofensiva -pestañeó varias veces y juntó las manos haciendo una pose tonta, pero divertida-; soy muy, muy inofensiva y buena chica -dejó de hacer esa pose y miró a Ivayne con una sonrisa-... mentira.

Correspondió de nuevo a las risas de Ivayne y miró a ambos lados.
-Espero que no, también... Aunque nunca se sabe...

April pensó en lo mucho que había llevado viviendo sola, en lo aislada que se había sentido, y en unos minutos, cuánto había confiado en Ivayne y en su sonrisa fácil.
-¿Sabes? Hacía mucho que no me reía tanto... Eres muy simpática, Ivy.
Las comisuras de sus labios se elevaron, preparando una sonrisa divertida.

FdR: Nosotras preferíamos a Victoria antes que a Bella, la de Crepúsculo, porque al menos Victoria se quedaba con los dos, xD La otra coge y se queda con la lámpara andante xDD
Y no pasa nada Smile

Ahora vamos a hacer cosas malas... Muahahaha :33
Y perdón, me salió cortito xD

por **Ivayne Lann** Miér Dic 14, 2011 5:38 am

Ivayne entrecerró los ojos, pensativa.

-Es posible, pero ahora me pica la curiosidad -comentó con una sonrisa consecuente-. Si la Organización es real nada impide que los mutantes tengan algo parecido, ¿no? -razonó encogiéndose de hombros.

Sacudió la cabeza, divertida ante las tonterías de April. Desde luego, loca tal vez no, pero inofensiva no le parecía para nada. Estaba claro que su poder tenía mucho potencial y, a su parecer, ella tenía cabeza como para saber utilizarlo en su favor.
Ivayne sonrió nuevamente, algo abrumada por los elogios. La verdad, necesitaba socializar más. Aquello de charlar con alguien una vez cada siglo y medio y que apenas supiese dar conversación le parecía muy incómodo. Lo cierto era que no le molestaba su escasa vida social, pero recordaba con cariño los pocos años de instituto que había llegado a hacer y lo bien que lo pasaba cuando salía en grupo. Nunca lo había echado de menos, pero de repente se le ocurría que no le importaría tener una tarde de tranquis con gente a la que pudiera considerar sus amigos.

-Gracias, tú también -dijo finalmente, ampliando la sonrisa-. Oye, ¿no querías ver la ciudad? -recordó de pronto, pensando en que a lo mejor había entretenido mucho a April y que sin duda ella estaría cansada y deseosa de asearse, dormir, comer y ese tipo de cosas que necesita la gente que lleva años viviendo en el bosque.

FdR: Uf, Bella xD Le he pillado una manía a Crepúsculo... Pero Jacob no me caía muy en gracia, así que tampoco tenía mucho contra Bella cuando leí los libros xD Lámpara andando, lol xD
Siii, incendiemos algo Yo lo enciendo y tú lo dispersas
Tranquila, lo importante es la calidad, no la cantidad (?) xD

por **April R. Williams** Vie Dic 16, 2011 2:58 am

Ivayne tenía razón. ¿Por qué no iban a poder ellos tener una organización? Vaya, April no lo había visto así.
-Pero... -comentó- sería mucho más... rudimentaria, creo yo. Nosotros no tenemos “sus armas” ni su “dinero”... -hizo una mueca al pronunciar esos términos, los había oído, pero no sabía exactamente el por qué de su existencia.

Asintió ante la pregunta de Ivy.
-Pues la verdad es que sí. Llevamos bastante tiempo hablando y yo sigo oliendo a... -arrugó el entrecejo, estaba segura de que ella la entendería- bosque -sonrió débilmente para indicar que estaba bromeando-. Es un olor particular, como años y años de no encontrar un río cerca, ¿sabes?

Pensó en cómo sería la ciudad y eso la incomodó.
-Hay... quiero decir, ¿quién “manda” en la ciudad? ¿O no manda nadie y cada uno hace lo que quiere?
April sentía curiosidad por saber cómo se organizaba la ciudad, poder entender a varias personas quizá la ayudase a adaptarse.
-Además -agregó-, no sé cómo... ¿cómo me presentaré? Admite que la táctica de agarrar por el brazo no funciona muy bien... Tú eres la excepción -se echó a reír-. No se me da bien eso de saludar y hablar aunque... -miró a ambos lados- Tampoco creo que haya mucha gente con la que hablar por aquí, ¿no?

FdR: Ña, yo los aguantaba -mentira xD-.
Sí *---* :3
Ah bueno, entonces nada, me esforzaré más la próxima vez xD (;

por **Ivayne Lann** Sáb Dic 17, 2011 7:24 am

Ivayne enarcó una ceja, sorprendida ante esa respuesta. Los mutantes no tendrían armas, pero desde luego para ella los poderes eran mucho más útiles que cualquier tipo de arma de fuego. Al fin y al cabo no eran tan efectivas. Pero no era eso lo que le había llamado la atención.

-¿De qué les sirve el dinero ahora? -preguntó con una sonrisa sarcástica. Quedaban tan pocos humanos que quienes les gobernaban los controlaban a todos sin necesidad de un gran poder económico-. De todas formas si que son peligrosos. Pero aunque no tengo ni idea de cómo sería una organización de mutantes, no me parece que las fuerzas estuvieran muy desequilibradas -comentó pensativa. De hecho, y sabiendo a la perfección como estaban las cosas, no era pesimista en cuanto al bando mutante.

La elementalista rió sin malicia al escuchar a April. El mar no estaba muy lejos, apenas unos kilómetros, pero era cierto que viviendo en el bosque no valía en absoluto la pena correr un riesgo tan grande como el que supondría dirigirse a él sólo por tomar un baño.

-Cuando te apetezca te enseño los baños, ya sabes -le recordó, en parte para que se lo pidiera cuando quisiera sin sentirse incómoda.

Aquella pregunta llevaba tiempo rondándole a Ivayne por la cabeza, pero nunca se había molestado en descubrir cómo funcionaba la ciudad. En realidad era poco relevante puesto que allí todos los mutantes eran bien recibidos y las cosas funcionaban perfectamente, así que se había desatendido. Pero de vez en cuando pensaba que debería saber quién se encarga de su bienestar.
Por lo pronto se encogió de hombros con una expresión culpable.

-La verdad es que no tengo ni idea -confesó-. Estoy segura de que alguien manda, pero no sé quién es, ni qué hace, ni nada -Le costaba creer que la ciudad funcionara sin una administración, por eso estaba tan segura de que alguien estaba al mando. Pero nada más. Volvió a encogerse de hombros y sacudió la cabeza. En lo relativo a los ciudadanos tampoco era una gran fuente de información-. Ya sabes que yo no soy de relacionarme, pero por lo que he visto esto es una ciudad barra pueblecillo normal. La gente es algo más desconfiada que antaño, pero por lo demás las relaciones son básicamente lo mismo -Más que nada las personas se dejan guiar por tu aspecto. Si no das mal rollo y creen que no vas a cargártelos mientras duermen te aceptan e intentan hacer migas. Y si no pasan de ti. Como en un instituto-. Ten en cuenta que la mayoría de gente es joven. Tienden más a ser abiertos -O al menos eso le había parecido siempre.

por **April R. Williams** Vie Dic 23, 2011 6:48 am

April temió haber metido la pata cuando observó la expresión de Ivayne. Por suerte, solo parecía un poco sorprendida por su punto de vista y no a punto de martirizarla, como sí que habrían hecho algunos mutantes locos.
-Bueno, en eso tienes razón, no creo que haya mucho que comprar ahora mismo -sonrió, quería que los temas de conversación fuesen fluidos y tranquilos, no tan discordantes-. Sé que son peligrosos, y también que no es que nosotros estemos en desventaja, pero... la verdad es que se escucha de todo por ahí -hizo un gesto vago con la cabeza en dirección a la salida/entrada del túnel-; ya no sé ni qué creer, Ivayne...

Sonrió al escuchar la propuesta de Ivayne.
-Hoy es el día oficial de Dale las gracias a Ivayne, por lo que veo -rió despreocupada, contenta de que el tema diese aquel giro tan agradable.

Escuchó atentamente las palabras de Ivayne sobre la vida allí, bajo tierra, y contestó intrigada:
-Entonces, te dejan en paz si tú los dejas en paz; aunque a veces hay gente que intenta hacer migas... ¿no? -Sonrió otra vez-. Pues qué bien, porque a mí no se me da bien ni hacer migas ni juzgar a la gente... Y por cierto Ivayne, no me pareces muy antisocial ni nada por el estilo... -le guiñó un ojo exageradamente, de broma.

Otra vez asaltó a April el pensamiento de su hogar, su casa, donde vivía con su madre y sus hermanos; el lugar en el que estaban seguros, cuando no habían preocupaciones ni riesgos constantes de morir.
-¿No echas de menos... una casa? -preguntó murmurando, casi hacia sí misma- Un lugar donde vivir tranquila y eso... Admito que siempre había querido vivir aventuras, pero cuando te ves envuelto en todo esto... En fin, que hace unos años me hubiesen parecido tonterías, y ahora puedo flotar si me lo propongo -suspiró meneando la cabeza, sí, ojalá fuese un sueño y estuviese, en cuanto se levantase, en casa con sus hermanos y su madre. Y a ser posible, con su padre también.

por **Ivayne Lann** Vie Dic 23, 2011 7:21 am

Ivayne se encogió de hombros, apesadumbrada. Qué pesimista llega a ser la gente cuando no tiene ni idea. A veces, cuando pensaba en ello, le parecía que la sociedad siempre había sido una especie de instituto a gran escala. Están los importantes, los marginados y los que no encajan en ningunas de esas categorías. Los dos últimos hablan del importante aunque no tengan ni idea de si lo que dicen es cierto y el otro se ofende y ataca. Y así van las cosas. Cualquier rumor que te cuenten acaba volviéndose cierto si te lo explican dos personas diferentes. Aunque las versiones disten tanto entre sí que sólo queden un par de similitudes entre ambas. La cosa es hablar.

-No hagas ni caso de lo que diga nadie -recomendó seriamente-. Tú sólo observa y saca tus propias conclusiones -Esa era la única forma de asegurarse de que lo que sabías era lo más veraz posible. Fiarse de los demás era de locos.

Rió divertida con el comentario e hizo un gesto con la cabeza para aceptar el agradecimiento. Ella tampoco se consideraba una persona antisocial, pero claramente no era la mejor haciendo amigos.

-Bueno, cuando la gente aparece de la nada y se te lanza encima es más fácil ser sociable -comentó alzando una ceja para que quedara claro que estaba haciendo alusión a ella-. Pero aquí la gente no suele hacer esas cosas -Se encogió de hombros-. Y yo suelo evitar los lugares concurridos y las charlas innecesarias -Además, si quisiera hacer amigos no sabría cómo hacerlo. ¿Con qué excusa podría parar a alguien para ponerse a charlar? Sería sospecho desde cualquier ángulo.

Al principio no entendió a qué se refería, pues ella ya tenía una casa, pero después supuso que se refería a una especie de hogar. De hecho se había sentido así durante mucho tiempo, pero para ella el golpe había llegado algo más tarde porque no fue consciente de la pérdida del hogar hasta que sus padres no murieron.

-Antes sí -contestó con una especie de melancolía-. Porque cuando me quedé sola pasé muchos años viajando... No me atrevía a asentarme en cualquier parte -parpadeó como regresando a la realidad-. Pero cuando encontré la Ciudad y decidí quedarme a vivir aquí supongo que hice de este sitio mi nuevo hogar. Al fin y al cabo para mí el hogar siempre ha sido el lugar donde más cómoda me encuentro, y ahora mismo se me hace difícil pensar en un sitio en el que pueda estar mejor que aquí -dijo sonriendo alentadoramente.

por **April R. Williams** Lun Dic 26, 2011 8:49 am

Ivayne miró a April seriamente al decirle que no hiciera caso a los rumores. La joven mutante solo atinó a asentir y a sonreír, de acuerdo con su amiga.
-Pues mis conclusiones por ahora son... que en el bosque hacen falta, al menos, un váter y una ducha -bromeó de buena gana.
La verdad es que la vida en el bosque, aparte de difícil, complicada y dura; era deprimente, y podías volverte loca intentando conservar la cordura. Todo el tiempo atenta, todo el tiempo en guardia... Cualquiera sobrevivía a eso sin un váter y una ducha... Qué suerte tenían los jodidos humanos...

Vio reír a Ivayne y agradeció nuevamente el hecho de que pudiesen pasar a temas más agradables.
April miró a Ivayne cuando esta última hizo el comentario sobre la gente que aparecía de la nada y la joven elementalista del aire sonrió.
-Mmm... pues entonces sería mucho mejor si todo el mundo se tirase encima de los demás a bocajarro, ¿no? -rió, seguía sorprendida de la rapidez con la que había adquirido confianza a Ivayne y lo ligera que se sentía cuando charlaba tranquilamente con ella-. Acepto lo de que seguramente no es normal que alguien se te tire encima y te diga "!hola!" y que eso puede parecer raro, pero yo soy una cría, una chica que ha vivido demasiado en muy poco tiempo como tú, y aun así ambas somos... divertidas -rodó los ojos con una sonrisa-, por así decirlo; así que al menos algún otro mutante debe haber por ahí que también sea agradable, ¿no?

Ivayne intentaba darle ánimos, al menos, así lo entendió April cuando su joven amiga le habló de su largo viaje y su final asentamiento en la Ciudad.
-Yo siempre le tuve un cariño especial a la casa en la que vivíamos mis padres y yo, ¿sabes? -comentó la chica sonriendo un poco melancólica- Me gustaba el jardín, corría y jugaba con mis hermanos allí, qué cosas; cómo cambian las cosas en unos cuantos años -levantó la mirada y se centró en el presente, no quedaría muy bien echarse a llorar por haber perdido a su familia en ese momento-. Espero poder sentir esa sensación de comodidad en poco tiempo si me quedo aquí -rió, se sentía liviana como una pluma; agradecía el intento de Ivayne de alentarla.

-Gracias, Ivayne; has sido muy amable, de verdad -su sonrisa se acentuó- y dime, ¿qué se supone que hace un mutante para divertirse por aquí habitualmente?
Esperó su respuesta mirándola, con una sonrisa brillante, aunque no sabía exactamente qué esperaba que le dijera Ivy. ¿Los mutantes se tiraban desde una colina por diversión? ¿Leían? ¿Mataban humanos? Vale, eso era una gran exageración, !pero a saber qué se suponía que hacían unos seres extraordinarios con poderes para divertirse!

por **Ivayne Lann** Lun Dic 26, 2011 9:41 am

Bueno, claramente el bosque no era un centro comercial, pero desde que estaba en la Ciudad Ivayne no dejaba de pensar en que los mutantes que se encargaban de ella deberían ponerle a las cosas más fáciles a los que, como April, estaban desamparados y llegaban allí gracias a un golpe de suerte. Vamos, que deberían ayudarlos a encontrar aquel lugar seguro bajo tierra. Al fin y al cabo si los mutantes se ayudaran entre ellos serían más fuertes.

-Si, está claro que el bosque no es el lugar más cómodo del mundo para vivir -corroboró divertida-. Pero cerca de la costa la vida es más sencilla -terció basándose en su propia experiencia personal. Ella había tenido que bajar desde Dinamarca y para guiarse había recorrido las costas, para evitar desviarse hacia el centro del continente, donde era menos probable que se asentara la población superviviente.

La elementalista se encogió de hombros. Nunca se le había ocurrido pensarlo, pero de haberlo hecho jamás de hubiese autodefinido como "divertida". De haber comparado al resto de habitantes de la Ciudad con ella misma más bien los habría calificado de reservados y semihostiles, que era más o menos como se veía ella misma.

-Obviamente debe haber gente agradable por aquí -admitió-. Pero como ya te he dicho yo nunca hablo con nadie. Tú pareces más abierta, si te lo propones seguro que entablas amistad con alguien pronto -sonrió.

Ivayne la entendía. Un hogar no es algo de lo que la gente se desprenda fácilmente, y una vez hecho cuesta acostumbrarse al hecho de no tener un sitio al que volver siempre y donde sentirse seguro, pero aún así ella no lo compartía de la misma manera.

-Para mí el hogar siempre estuvo donde mi familia, por eso una vez que los perdí asumí que ahora el hogar sólo estaría donde estuviera yo -confesó sin ningún reparo. Hacía demasiado tiempo de todo aquello como para seguir sintiendo aquellas horribles punzadas en el pecho que la acometían en el pasado siempre que recordaba a sus padres y a su hermano-. Seguramente tú también acabas siendo feliz aquí -Tal vez "feliz" no fuera la palabra adecuada, pero no quería desanimar a la chica más de lo que ya lo estaba.

Volvió a inclinar la cabeza para aceptar el cumplido y acto seguido arrugó la nariz preguntándose qué hacía la gente para divertirse.

-Bueno... la diversión ya no es como antes, evidentemente. Aquí abajo hay cosas realmente bonitas que ver, pero una vez te conoces la Ciudad si quieres algo interesante tienes que salir al exterior. Leer es complicado porque casi nadie conserva libros -suspiró apesadumbrada-. Yo lo que suelo hacer es entrenar con mis poderes -Y de vez en cuando salía fuera, cazaba, recogía plantas comestibles y se dedicaba a la cocina, pero eso era un secreto.

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