Soledad...[Libre]

Era de noche, caminaba por la playa con el cielo que se encontraba en la suma oscuridad, sin estrella alguna, ninguna, ninguna, no importaba cuanto busque no había ni siquiera una presente en esas densas tinieblas, esa noche…era una noche sin estrellas y de brisa fría mejor dicho helada, golpeando mi rostro, mi torso desnudo, todo mi cuerpo en su completa forma.

Ni tenia idea por que no llevaba alguna camiseta o algo con aquel frío que hacia, esa no era mi pregunta en ese momento, no había preguntas en mi mente, solo escuchaba el crujir de la arena siendo pisada por mis pies descalzos…y fue cuando tuve un vago recuerdo abrazando mi mente de momento a otro, una noche casi similar, caminando con mi madre, mi padre y hermanos, mi familia, ¿Cómo paso esto?, ahí me di cuenta lo valioso que termine perdiendo.
Un escalofrío rodeo mi espalda, erizando mi piel y con mirada melancólica con toque nostálgico lleve mi vista a la luna llena quedando casi anonado, estupefacto con ella, deteniendo mis pasos, apretando mis dientes junto a los puños reteniendo esas ganas de soltar lagrimas que me había llegado en ese instante.

Me mantuve en la misma posición por minutos, cada vez apretando más y más mis dientes junto a los puños, mis manos debido a la presión tomaban un rojo intenso, se escuchaban rechinar mis dientes, pero solo inhale el aire frío que rodeó mis pulmones para luego exhalar con suavidad por la boca, por suerte eso logro calmarme, quite la fuerza y seguí caminando sobre esa arena la cual continuaba crujiendo a cada paso, comencé a pensar tranquilamente llevando mis manos a los bolsillos, ya no había necesidad de llorar, por alguna razón habré que tenido que sufrir lo de mi pasado, todo esta escrito, abandone la sonrisa de lado indicadora de mis reflexiones y sonreí ampliamente dirigiéndome hacia la orilla del mar corriendo como un niño, apenas al estar cerca me senté sobre la arena mojada descuídamente permitiendo que el leve vaivén del agua rocé mis pies.

Los minutos pasaban y pasaban la sonrisa siguió presente en mi rostro, apoye mis manos en la arena como sosteniendo mi cuerpo, solté un suspiro cerrando mis ojos sintiendo el toque del agua acompañada de la brisa congelada, solo sintiendo, metalizándome de que era el único en el mundo entre otras palabras aquello me ayudo a escapar de la dura, cruel y lastimante realidad. Todo aquello tan relajante, una bella sensación, soledad combinada con el silencio, como siempre terminaron llegando mis envolventes pensamientos, que por suerte aquella vez no eran sobre mi pasado, eso fue bueno y aporto más tranquilidad a mi cuerpo.

Seguía pensando con mis ojos cerrados y aquella sonrisa dibujada en mi rostro, extrañamente eran pensamientos con totalmente positivos, algo un poco increíble de mi parte, la mayoría de las veces estoy pensando en cosas negativas, tristes y todos sus posibles sinónimos o parecidos a pesar de eso de todas formas era bueno hacia tiempo que no lograba sentir ese tipo de tranquilidad.

De un momento a otro pude captar agua del mar golpeando contra mi pecho, esto como era de esperarse me saco de mis pensamientos,haciendome estremecer ante el contacto, pero razonando lo peor pensé que era una ola y abrí mis ojos pero nada, una ola aproximándose, un vaivén más fuerte del mar, no…no era nada pero mirando toda aquella agua en su completa extensión termine haciendo énfasis en una parte del mar donde pude definir a la distancia una figura, entonces ahí comprendí alguien se había lanzado al agua pero…espera ¿con lo congelada que se encontraba aquella agua? Esa persona tendría que estar loco o loca en todo caso pero pensándolo bien mira quien lo decía, alguien como yo, me reserve mis comentarios mentales después de pensarlo bien.
Sin nada que hacer más que observar a aquel ser allí me quede en silencio sin moverme un mínimo centímetro casi asimilando un animal cazador acechando a su presa.

No había despegado en segundos la mirada a aquella persona que se encontraba allí, que aun no podía definir con mucha exactitud y después de momento a otro puedo notar fácilmente que era una chica, seguí sin despegarle la mirada hasta que mis oídos percibieron un “¿Qué miras?” con un tono algo alto y descortés, desconsiderado y bueno todos sus posibles sinónimos. Pero igual no me importo mucho que digamos, con una sonrisita de toque sarcástico mirando el suelo para fijarle otra vez la mirada.

-¿Qué miro?- pregunte sin borrar la sonrisita- nada- negué levemente con la cabeza mientras me rascaba la mejilla con un poco de desinterés-.

Notando que temblaba por el frío, sonreí haciendo un gesto burlón frotándome los brazos con ambas manos como indicando que hacia bastante frío mientras ahogaba una risita molesta,que probablemente pudiera irritarle ,en mi garganta, haciendo un gran esfuerzo para retenerla.